Para ganar hay que arriesgar

Hace un tiempo me preguntaba, "Donde fuego hubo cenizas quedan?" Es una frase que muchas veces nos da miedo. Ya que muchas veces, puede complicar algunas relaciones.

Me hice esta pregunta, y lo comprove.

El jueves por la mañana me fui caminando, hasta una playa. Salí muy temprano para volver temprano a la ciudad. Ya eran las tres de la tarde, y me tenia que volver. Me fui caminando y en fin hice dedo, ya que quedaba muy lejos. En fin, cuando llegue al centro me dirigí a la terminal.

Me encontraba muy nervioso, por que no sabia que pasaría. Volviendo un poco al pasado, hace semanas vengo charlando mucho con mi ex, la verdad es que me nunca lo deje de querer. Me parece una persona sincera, y muy buena. Así que decidimos vernos, ya que los papas corrían una carrera, ese fin de semana. Era la ocasión ideal, para poder estar con el y charlar todas esas cosas que pasaban dentro de mi.

Y hay estaba, en esa terminal vieja, y muy abandonada. Se encontraba tirado en el pasto, con su mochila de campamento. Lo salude, el se encontraba muy feliz. Era un día de mucho calor, era perfecto. Así que decidimos quedarnos en el centro, como para romper el hielo.

Ya habían pasado cerca de un año, desde la ultima ves, que estuve con el. Estábamos tirado en un parque, hablando de la vida. En esa lo mire fijo a los ojos, tratando de recordar, eso que alguna ves me había cautivado. Enseguida sonrió, y le vi esos ojos verdes, y la vida me sonreía por segunda ves.

Continuara...